El Cristo de los Favores

Santísimo Cristo de los Favores

   
     Entre 1679 y 1682, Granada y toda su provincia sufre una epidemia de peste bubónica que hizo que se disparasen los indices de mortandad, lo que provocó que se implorara a lo divino para que dicha epidemia cesara. Un ejemplo de esta imploración lo podemos encontrar en el Barrio del Realejo de Granada dónde en 1682 los vecinos levantaron un monumento pétreo (El Cristo de los Favores) en la actual plaza del Campo del Príncipe.

     En 1884 se publica en el Boletín Oficial del Arzobispado un Decreto en el que entre otras cosas se dice: "Recomienda que es grato a Dios rezarle en el Campo del Príncipe cinco Padrenuestros en recuerdo de las Cinco Llagas de la Pasión y Muerte del Redentor y tres Avemarías en recuerdo de las tres horas que pasó la Madre al pie de la cruz".

     Así y desde entonces cada Vienes Santo a las tres de la tarde, se congregan feligreses en torno al Cristo de los Favores para solicitar sus Favores y cumplir sus promesas.